POR WAGNER PIÑEYRO,
Enviado a Ecos del Sur.
El verbo lamer tiene dos acepciones según el diccionario de la Real Academia Española, por una parte significa: pasar la lengua por la superficie de algo, y por otro lado, quiere decir: rozar blanda y suavemente algo al pasar por ello.
Como definición o concepto más vulgar existe el verbo lamber, como sinónimo de adular tanto en países de América Latina así como también en otros países del continente americano, incluyendo la República Dominicana. De la misma manera se emplea “lamber” y en otras regiones de Europa y de Hispanoamérica como sinónimo de lamer.
Entonces un “lambón” equivale a un adulón en muchos países de habla hispana, y tiene como sinónimos los términos “limpia polvo” y “limpia saco”, “lame nalga”, lambiscón, tumba polvo y otros epítetos más vulgares, en la República Dominicana.
Para definir el término más genérico aquí en dominicana decimos “lambeterismo” o “lambonismo”, “limpiapolvismo” o “limpiasaquismo”, “lambonería”, entre otros vocablos despectivos.
La adulación es la segunda pata de las cinco que tiene la mesa cultural dominicana, siendo las otras cuatro patas: los privilegios, la crueldad, la corrupción, y el chisme conjuntamente con otras malas artes emparentadas.
Estas cinco variables han permanecido como constantes a lo largo de toda nuestra historia desde la llegada de Colón, es decir, que nunca han faltado.
Pero en caso que nos interesa a nosotros es lo que se da a diario aquí en Barahona en las esferas políticas que pasan de lo bello a lo feo, de lo ridículo a vulgar respecto al lambonismo que impera en la política de Barahona.
La mayoría de esos personeros mediocres, pobres de mente, de poca visión se valen del lambonismo para escalar posiciones, sin tener ningún tipo de merito político, personal, profesional trayendo como consecuencia el golpeo sistemático de los compañeros y compañeras con basta y mucha sobras de meritos políticos, personales, profesionales y morales.
Personas con escasos logros, trabajos políticos se valen de este comportamiento casi enfermedad para lograr sus objetivos no importando a quien o a quienes se llevan por delante para conseguir lograr sus intereses.
Aquí en Barahona todos y todas nos conocemos, sabemos para que da cada quien, sabemos las trayectorias políticas, personales, profesionales y morales de esos personeros actores del lambonismo que abundan en las esferas políticas de Barahona.
Estamos destinados a tener un cambio radical e inmediato de esos politiqueros, miopes políticos, de mentes chicas, de mucha ambiciones desmedidas y personales, y llevar a las estructuras una generación nueva de dirigentes y dirigentes para que esa mala práctica del lambonismo desaparezca y que en las posiciones políticas y publicas estén representadas por los verdaderos dirigentes, trabajadores, con vocación de servicio, con solidaridad a su prójimo, sean los que estén al frente de los organismos partidarios y públicos.
Nadie se baña dos veces con la misma agua de un río…….