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POR YOBANY DE LEON
Enviado a Ecos del Sur
En la familia en sentido general es un deseo reinante que sus miembros puedan alcanzar metas favorables que le permitan a cada uno de ellos insertarse en el área productiva y alcázar a la vez puestos de importancia en el sector privado como en el público.
Conocemos casos en donde los padres, hasta con edades avanzadas, envían a sus hijos a otras ciudades a estudiar en universidades privadas, hasta la misma del Estado, pagándole alquileres de apartamento, enviándole mensualidades, gastos de estudios, transportes y otros; pero al final estos no cumplen con su cometido de obtener el título universitario, se mantienen hablándole mentiras tras otras.
Es penosa la situación cuando estos padres se enteran de que al cabo de 4 a 5 años que sus vástagos solo usaron los recursos en otras cosas menos en los estudios y ese tiempo fue todo perdido, pero la cosa es peor aun, cuando las inversiones y los gastos son para más de un hijo y todos siguen el mismo camino de burlarse del sacrificio de sus progenitores.
Si nos ponemos a analizar las inversiones que hicieron y han hechos nuestros padres para que logremos una carrera universitaria, técnica o cualquier otro oficio, son tan valiosas como la vida misma.
Es nuestro deber destacar que no son todos los hijos iguales, existen otros que sus padres por el nivel económico precario y limitado, sus hijos también se sacrifican, teniendo que subsistir con los pocos recursos que le son enviados; vemos ahí como estos muchachos se la ingenian y logran a base de sacrificio que nadie sabe como pudieron lograr su meta de adquirir el anhelado título.
En una buena lectura para aquellos que no saben y desconocen el deseo de sus padres de verlos lograr el sueño de tener a sus hijos insertados en la sociedad con la capacidad necesaria y el reconocimiento de los demás, no hay mejor tributo y regalo para ellos.
Según estudios, los padres siempre tienen expectativas hacía los hijos e hijas, como esperanzas, deseos, sueños, ilusiones, constituyendo una fuerza motivacional, orientadora y económica a favor de ellos. Siendo de gran importancia el desarrollo intelectual de sus hijos que le sirven de modelo hasta lograr un buen status en la sociedad.
