Barahona: En la mina de larimar se ganan el sustento decenas de familias pobres de las comunidades de Bahoruco y La Ciénaga y así como le permite ganarse el sustento, también les quita la vida a los que buscan la piedra preciosa para venderla a artesanos que la convierten en hermosas joyas.
La razón para tantas muertes derivadas de esta actividad es la condición rústica en que los mineros realizan la extracción de la piedra preciosa, sin equipos de seguridad y protección.
La más reciente víctima ha sido el nacional haitiano identificado solo como Gilé, de unos 28 ó 30 años, quien falleció el pasado martes cuando realizaba trabajos en el interior de la mina de larimar.
Según el diagnóstico del médico legista, Miguel A. García Ortiz, quien examinó el cuerpo del extranjero, certificando que su deceso se debió a asfixia por sofocación.
Gilé fue conducido a la sala de emergencia del Hospital Regional Universitario Jaime Mota. Sin embargo, los médicos que lo recibieron ordenaron llevar su cuerpo a la morgue, porque el extranjero llegó sin vida.
Según informaciones ofrecidas, el nacional haitiano se encontraba en el interior de la mina laborando e iba a poner un bombillo para iluminar el área, pero sufrió un desmayo y cayó bruscamente al suelo, golpeándose fuertemente en la cabeza.
El extranjero fue auxiliado por sus compañeros quienes lo trajeron de urgencia al hospital, pero los esfuerzos resultaron infructuosos, ya que este llegó sin vida al centro de salud.
Francisco Montero Sánchez, secretario general de la Cooperativa de la Mina Larimar Las Filipinas, acudió a la morgue y dijo que han fallecido más de 20 personas en los últimos años en esas mismas condiciones y llamó la atención de las autoridades para que se tomen las medidas necesarias para preservar las vidas de los mineros.
La Subdirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim) y de Homicidios, de la Dirección Regional Sur de la Policía Nacional, realiza las investigaciones en torno a la muerte del obrero.