Por Claudia Fabián Pineda
Tamayo.- Una vivienda resultó destruida por completo y otras dos casi por la mitad al derribarse una mata de limoncillo y caerle encima a las casas, ubicadas en el sector Alto de Las Flores, de este municipio, perteneciente a la provincia Bahoruco.
La vivienda que se destruyó por completo es propiedad de Alida Medina. El hecho ocurrió pasada las 8 de la noche de ayer miércoles, creando un ruido estruendoso cuando la mata cayó de cuajo, un frondoso árbol que según los vecino tiene más de 80 años.
Las demás viviendas que resultaron afectadas las cuales presentan daños de consideración son propiedad de Fernández Batista y Miguelin Reyes.
Luis Alberto Medina, hijo de Alida Medina, dijo que lo más importante fue que no se registraron pérdidas de vidas humanas, ya que las cosas materiales pueden conseguirse con facilidad, “pero la vida no podemos devolverla”.
Sin embargo, conforme a los reportes no hubo víctimas porque los ocupantes de las tres viviendas pudieron salir huyendo, situación que generó pánico entre los dueños de la viviendas, así como entre los vecinos.
Solicitaron de las autoridades una ayuda para poder volver a construir la vivienda de su progenitora, la cual ha tenido que ser llevada a su casa, ya que no está apta para ser habitada.
Asimismo, las otras dos familias que resultaron con sus viviendas parcialmente destruidas, también, solicitan la ayuda de las autoridades para reconstruir nuevamente sus hogares, debido a que carecen de los recursos económicos para hacerlo por ellos mismos.
Tamayo.- Una vivienda resultó destruida por completo y otras dos casi por la mitad al derribarse una mata de limoncillo y caerle encima a las casas, ubicadas en el sector Alto de Las Flores, de este municipio, perteneciente a la provincia Bahoruco.
La vivienda que se destruyó por completo es propiedad de Alida Medina. El hecho ocurrió pasada las 8 de la noche de ayer miércoles, creando un ruido estruendoso cuando la mata cayó de cuajo, un frondoso árbol que según los vecino tiene más de 80 años.
Las demás viviendas que resultaron afectadas las cuales presentan daños de consideración son propiedad de Fernández Batista y Miguelin Reyes.
Luis Alberto Medina, hijo de Alida Medina, dijo que lo más importante fue que no se registraron pérdidas de vidas humanas, ya que las cosas materiales pueden conseguirse con facilidad, “pero la vida no podemos devolverla”.
Sin embargo, conforme a los reportes no hubo víctimas porque los ocupantes de las tres viviendas pudieron salir huyendo, situación que generó pánico entre los dueños de la viviendas, así como entre los vecinos.
Solicitaron de las autoridades una ayuda para poder volver a construir la vivienda de su progenitora, la cual ha tenido que ser llevada a su casa, ya que no está apta para ser habitada.
Asimismo, las otras dos familias que resultaron con sus viviendas parcialmente destruidas, también, solicitan la ayuda de las autoridades para reconstruir nuevamente sus hogares, debido a que carecen de los recursos económicos para hacerlo por ellos mismos.