TOMADO DE ARMARIO LIBRE
TAMAYO, provincia Bahoruco.- La siembra y producción de la pitahaya se ha convertido en una de las atracciones más codiciadas de campesinos y agricultores del país, debido al mercado asegurado, afirman, a la gran demanda y los altos precios en los mercados nacionales e internacionales.
TAMAYO, provincia Bahoruco.- La siembra y producción de la pitahaya se ha convertido en una de las atracciones más codiciadas de campesinos y agricultores del país, debido al mercado asegurado, afirman, a la gran demanda y los altos precios en los mercados nacionales e internacionales.
Tradicionales productores de plátano y guineo de las provincias de Bahoruco y Barahona, ahora se han dedicado al cultivo de la pitahaya, y como dice Aníbal Maríñez, está tan enamorado del proyecto, que hasta ha tenido problemas con su esposa, debido al poco tiempo que le dedica, por estar dentro de la plantación de la exótica fruta.
El enamoramiento del cultivo de la fruta no es casual, asegura, es que 106 tareas producen 150 quintales, con un mercado aseguro en varios países y buenos precios.
“Bueno yo estoy enamorado, en estos días la mujer mía por poco me bota, dice que ya la cambié por ella”, manifestó.
Maríñez está tan entusiasmado y apegado a su proyecto de pitahaya en Tamayo, que cuando llega a la plantación, antes de entrar, la habla a las plantas, y asegura que lo escuchan.
En la provincia de Barahona hay 106 tareas sembradas que comenzarán a producir entre mayo y abril.
Los primeros 80 quintales de pitahaya fueron comercializados en la zona y varios supermercados en Santo Domingo.
“La pitahaya tiene un ciclo de producción desde mayo hasta octubre, pero a veces se extiende hasta noviembre. La pitahaya puede producir entre diez y 14 floraciones; en el mes se podrían producir hasta dos floraciones”, precisa Maríñez.
Destacó que los financiamientos para cultivar la pitahaya es a nivel persona, el Banco Agrícola y el Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (Feda).
Dijo que tiene dos financiamientos, uno por el Feda por más de RD$5 millones y otro por el Banco Agrícola por RD$77 millones para sembrar 400 tareas de la planta exótica.
“Según los análisis y tomando en cuenta los que ya han producido, un financiamiento se paga entre tres y cuatro años. Entre tres a cuatro años es el rango para que el productor se ponga a tono”, manifestó.
Consideró, que el préstamo podría pagarse en menor tiempo, pero que las autoridades le dan ese tiempo para que no haya problemas.
Destacó el clima que impera en el Sur, ya que la fruta necesita mucho sol, lo que precisamente, hay en Barahona y la región.
Maríñez explicó que está afiliado a una asociación que tiene 42 socios, pero destacó, además, que 21 de ellos pertenecen al clúster nacional de pitahaya.
Dijo que su proyecto fue producto de una visita sorpresa realizada en el Cibao, entregada al clúster y repartida en el Sur.
Agregó que al clúster le entregaron siete proyectos de siembra de pitahaya, cultivar 48 tareas en el Sur.
Sostuvo que en la actualidad hay para cultivar en la zona de Barahona, 500 tareas, más otras 606 en producción y el proceso de producción.
Dijo que el presidente Danilo Medina anunció el respaldo de otro proyecto de pitahaya en Mella, Barahona, pero afirmó que está más difícil de comenzar por la falta de planta y organización de los beneficiados.
Sostuvo que el clúster es quien maneja las plantas de pitahaya, por lo que dijo, manejan los sembradíos para beneficiar a los miembros de su organización.
Maríñez recomendó a todas las personas interesadas en producir pitahaya, organizarse al clúster para que no tengan problemas para sembrar.
Paso Sena, Pedernales.
En la comunidad Paso Sena, de esta provincia fronteriza, Américo Antonio Mena, tiene cultivadas ocho tareas de pitahaya, y al igual que Aníbal Maríñez, en Bahoruco, está esperanzado en sacar grandes beneficios al producto del momento.
Mena afirma que una plantación de pitahaya tiene una vida de producción que podría durar 100 años, sino es que se siembra en tierras arcillosa.
Dijo que ese cultivo que aunque no parece tradicional en la zona, si es atendido puede producir frutas mucho más grande, y podría generar entre 12 y 15 cosechas en los meses de abril hasta mediado de diciembre.
Mena dijo que la pitahaya tiene tantas propiedades medicinales que en Canadá, España y los Estados Unidos la contratan por anticipado.
Explicó que esta fruta tiene gran incidencia, por lo que está ampliamente demandado para tratar el estrés oxidativo y la rigidez aórtica en personas que sufren diabetes, lo que hace que sea un excelente alimento para prevenir trastornos que derivan de esas enfermedades.
