Por Modesto Peña.
En mi ciudad cunde el pánico por falta de amor, en la que a cualquier munícipe, funcionario le entra una locura o rabia, de destruir el amor que tenía desde antaño por su comunidad.
Recuerdo siendo un adolescente, cuando Barahona se le otorgo la sede de los quinto Juegos Deportivos 1981, mucho perdieron el amor, de que esta localidad no tenia condiciones para celebrar tales fiestas de la juventud……
Recuerdo también en mi etapa de pubertad, el parque deportivo o play de beisbol que está ubicado en la esquina caliente del Batey Central, vi a muchas estrellas degustar en ese santuario deportivo, el cual es un referente moral para la juventud altiva deportiva. Hoy se cierne una amenaza de desaparecer ese remanso de paz.
Cuantas añoranzas guardo de las retretas que se producían en el histórico parque Central, en el pasado sufrió una amenaza mortal de derribarla.
Ay!! El Cuerpo de Bomberos, cuantas entregas, pasión, sabiduría, abrigaron sus fundadores y quienes los siguieron hasta el 2005, hoy se conspira de destruir ese gran amor histórico que tiene ese edificio. Así nooooo…..
Destruyeron el patrimonio natural de la playa Casita Blanca y Punta Inglesa, para dar paso a la arrabalizacion y con ellos borrar los encantos de las bellezas de esos dos paisajes que nos regalo el Creador del Mundo.
El muelle o puerto de Barahona, al igual que del Batey Central, los estrangularon, hoy arrendados a precios de vacas muertes, destruyendo ese pulmón marino que nos invita mirar hacia el infinito.-
También cercenado por locura de amor.