POR DAVID RAMIREZ
Lo que hacía el juez de la Corte de Apelación de la Cámara Penal del Departamento Judicial de Barahona, Henry Caraballo, en un sitio tan solitario como lo es la playa Saladillas ya entrando la noche , cuando fue atracado y despojado de su arma de fuego por dos sujetos, es un asunto que no compete a nadie.
El hecho de que sea juez, no deja de ser humano, aunque en el tribunal tenga en sus manos el destino de una persona.
Me parece que no es adecuado cuestionar todo, insinuar cosas, dudando de esto o de aquello.
El magistrado es un hombre libre y puede ir donde le parezca, respetando las normas y teniendo en cuenta su condición de Magistrado.
Lo importante es que la Policía y el Ministerio Público capturen a los responsables de tan ultrajante acto y ponerlos a disposición de la justicia.
