La información fue dada a conocer por el Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático (CNLCC) y el Instituto de Abogados para la Protección del Medio Ambiente (INSAPROMA), las cuales urgieron la intervención de la comunidad científica para que cuantifique el fenómeno y sus impactos en la salud de la población y en los cultivos antes de que se pierdan vidas humanas y la producción agrícola de la zona.
Sugirieron la conformación de un equipo de investigación con científicos de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, UASD y de otras universidades, y de la Oficina Nacional de Meteorología, ONAMET, para que en el menor tiempo posible levante mediciones sobre el terreno de los eventos denunciados.
El CNLCC e INSAPROMA anunciaron que se comprometen a obtener apoyo de laboratorios y de equipos de alta tecnología y de expertos en emisiones de gases de universidades y de agencias científicas de los EUA y de Europa a través de sus contactos con las redes climáticas internacionales.
Afirmaron que durante el jueves, 18, el viernes 19 y el sábado 20 de marzo, la chimenea de Punta Catalina ha estado expulsando al aire una gran cantidad de gases ácidos enriquecidos con metales pesados que por efecto de una baja presión atmosférica han descendido a baja altura.
“Ayer, sábado, 20 de marzo, a las 7.27 de la noche, la gruesa humareda de Punta Catalina que durante todo el día había emitido la chimenea, se tornó totalmente negro, acompañado de un fuerte olor a azufre”, comunicaron.
Explicaron que en horas de la tarde del jueves y del viernes estas nubes de gases venenosos tocaron tierra, envolviendo en una neblina al área más cercana a la costa de Catalina, Playa Ubero, a Finquita Gloria y a una parte del núcleo urbano de Paya.
“La Red de Monitoreo Comunitario de Paya ha registrado los eventos del bombardeo de gases tóxicos de Punta Catalina en videos grabados en diferentes lugares y a diferentes horas de esos días. Varios de esos videos y fotos se suministran al público junto con esta declaración”, dijeron.
Expusieron que desde el viernes el bombardeo y la formación de nubes de gases tóxicos comienzan antes del medio día y se prolongan hasta las 8 de la noche, con una exposición continúa de un promedio de nueve horas por día sobre la zona.
