“Si mi madre deja un legado, si deja una lección, es el hecho de que una madre soltera no está destinada al fracaso per sé, lo que se requiere es sentido de dignidad, sentido de honor, amor a su familia, amor al prójimo y al trabajo, ella lo logró, ella es un signo de inspiración”, dijo en el velatorio.
El exmandatario hizo un recorrido por la vida de su madre, de quien destacó que a pesar de llegar a un cuarto curso de primaria era amante a los libros y recitaba poema.
De Sabana Grande de Boyá llegó a estudiar enfermería en la capital y a trabajar en un hospital. Contó además cómo fue la vida de doña Yolanda y la suya propia al estar en los Estados Unidos, donde partió su madre en busca de una mejor vida para sostener a su familia.
Habló entre pausas para sostener las lágrimas de cómo se esforzó en sus dos empleos para sostenerlo a él y a su hermano Dalcio. “Llevando siempre los valores que la caracterizan”.
Dijo que su madre lo inspiró en la política, ya que cuando no se sabía que era un círculo de estudio, un grupo de dominicanos se reunía en su casa en Boston a hablar del tema.
Expresó que aunque nunca soñó de joven llegar a la política siempre contó con el apoyo de su madre a quien los 27 de febrero iba a rendirle cuenta, luego de presentar las memorias de su gestión al país.
“Nuestra madre siempre nos acompañó, lo hizo siempre con discreción, lo hizo siempre con prudencia, lo hizo siempre sin ejercer ningún tipo de protagonismo ni estar en el centro de los grandes escenarios, lo hizo a la distancia pero siempre escuchaba sus palabras”, expresó.
Agradeció en su nombre y la de su familia a todas las personas de los diferentes extractos sociales el acompañarlo en estos momentos de dolor.
Doña Yolanda Reyna fue sepultada pasadas las 5:30 de la tarde de este jueves.
