Llegó el momento de que la industria turística nacional comience a trabajar a plena marcha. Hay una casi total apertura económica en el país, y las estadísticas médicas reseñan que la pandemia está en la fase de control.
Los dominicanos aprovechan al máximo las ofertas de los turoperadores, pasar fines de semana a bajo precio, en los principales hoteles de playa del país. Esto representa una gran confianza de los nacionales, en torno a las medidas sanitarias que se están aplicando.
Ya es hora de ir a buscar a los turistas fuera de nuestra isla. Hay que seguir trabajando en Europa y los Estados Unidos. Dar a conocer allí las medidas de seguridad que hay en los hoteles, y las facilidades que obtienen los turistas desde que pisa territorio dominicano.
El ministro de Turismo, David Collado, está haciendo una buena labor en dar a conocer las facilidades que ofrece el país a los turistas, y sobre todo a los grandes turoperadores. Todos debemos estar conscientes que la industria sin chimeneas es el principal generador de divisas, empleo y pago de impuestos que tiene el país.
Para lograr un desarrollo sostenido, el gobierno y el sector privado tienen que ir de las manos para hacer frente a todos los problemas que se pueden generar en torno al turismo. La meta actual debe ser lograr que vuelvan a trabajar a plena capacidad, todos los hoteles que estaban abiertos hace año y medio cuando se detectó la pandemia en el país.
Se está logrando insuflar esa confianza, y se debe ir con mucha precaución, porque no se puede olvidar que el Caribe y esta zona de América, son áreas muy apetecidas por los agresivos vendedores de facilidad de esparcimiento en las playas y las montañas.