Por Águeda Ramírez de Rodríguez.
Para El Faro del Sur
Foto: Ana Rodriguez.
Fundada en 1974 por don Máximo Francisco Ortiz Chapman (Danny), quien en ese momento se desempeñaba como Secretario del departamento de Ingeniería Civil del Ingenio Barahona, con una doble finalidad: producir sustento económico para él y su familia, y brindar un servicio para la época necesario, ya que existían en esta ciudad de Barahona solo tres ferreterías: la Guilliani, de doña Nadime Cury de Guilliani, la Sousa de don Darío Sousa y la Toral, de don Benjamín Toral. En la actualidad, es su propietaria doña Sonia Lebreault viuda Ortiz.
Esta ferretería está ubicada en la calle Jaime Mota número 38, donde anteriormente funcionaba un negocio propiedad de la familia Saladín-Bujosa, compuesta por el matrimonio de don Antonio Saladín y doña Chichí Bujosa, en el cual se dedicaban a la venta de café, cera y miel de abejas. A su lado existían otros dos establecimientos de servicio: las farmacias Méndez, propiedad del Dr. Antonio Méndez y la Hernández, del Dr. René Hernández.
Dice doña Sonia que en una primera etapa solo atendía el establecimiento Danny, mientras ella laboraba como secretaria en la empresa Américo Melo & Cia. C. por A, hasta que en 1989, luego de haber laborado para la citada empresa durante 24 años, se integró a las labores comerciales junto con su esposo, con quien procreó a tres hijos: Fabriccio, Irene y Sandro Ortiz Lebreault, de quienes recibieron nueve nietos y dos bisnietos.
Considera doña Sonia que su desarrollo ha sido favorecido por la organización y disciplina que desde sus inicios han imperado en el manejo de su administración y servicio al público, lo que a su juicio ha mantenido la fidelidad de sus clientes tras 48 años de servicios personalizados que ofrece.
Señala doña Sonia como dificultad enfrentada por su negocio la proliferación de ferreterías establecidas durante su ejercicio, 42 en total, lo que ha mermado la afluencia de clientes.
