Barahona.- “A mi me duele lo mío, a mi me duele lo mío. Me mataron, eso no se quedará así”, fueron las expresiones enfáticas del señor Domingo Vargas padre de la joven de 28 años de edad, que falleció luego de practicarle una cesárea en el Hospital Regional Universitario Jaime Mota, para desmentir la versión de centro de salud sobre el deceso de su hija.
La dirección del centro sanitario ofreció su versión de lo sucedido con Noibel Vargas Féliz, aclarando que se cumplió con los protocolos establecidos en el proceso de parto por cesárea realizado a la paciente y llevada al área de recuperación donde presentó un cuadro súbito con falta de respiración.
En llamada al programa Acción Mañanera de Palma 90.7 FM, negó las versiones del centro sanitario y que llevará el caso hasta las últimas consecuencias, porque entiende hubo negligencia en el caso.
Rechazó que impidiera que le realizaran la autopsia al cadáver de su hija como alega el centro de salud en el informe, acusándolo de presionar al chofer de la ambulancia en el tramo San Cristóbal-Santo Domingo, aclarando que el vehículo solo llegó hasta la zona denomina Los Cuatro Vientos.
Dijo que la familia estaba alegre esperando la llegada de su nieto y cuando llega al hospital encuentra el cadáver de su pariente en la morgue del hospital, la que dijo estaba militarizada.
El padre de la joven mujer fallecida dijo que supuestamente en el hospital se escondieron las pruebas del caso y que ni los médicos que realizaron el procedimiento quirúrgico figuran en el expediente del hospital y que legadamente participaron practicantes.
Señaló que están realizando los procedimientos de ley correspondientes, porque el caso no se quedara así “ellos chocaron donde no tenían que chocar”, que eso no se quedará así, reiteró enfáticamente.
