A partir de esta decisión han surgidos ataques feroces por parte de compañeros y compañeras del partido, inquietudes, felicitaciones…, y como me considero una persona responsable de mis actos, con una trayectoria de vida intachable, lo primero que debo decir, es que mi trayectoria política y social todos la conocen, dure más de 40 años siendo un fiel militante activo del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), uno de los pioneros y fundador del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en Barahona, en el 2014. Desde ese entonces he trabajado sin descanso, llegando a ocupar la presidencia de la Zona “C” y Secretario General del partido en el Municipio Santa Cruz de Barahona.
Gracias a mi trayectoria de trabajo por el partido, y por ser un fiel colaborador con mi gente de la base, he sido Regidor por dos períodos consecutivos, utilizando mis propios medios para lograrlo, y nunca he marcado fila en otros partidos políticos, ni lo haré porque soy un hombre de una cara.
Cabe señalar, que a raíz de dos eventos de salud (ACV) que he sufrido hace alrededor de dos años, por estar defendiendo la cuota de los compañeros de la base, y para que las cosas funcionen bien en la gestión de nuestro Presidente Luis Abinader, he tenido que hacer ciertas pausas de actividades propias de mis funciones como Regidor y como comunitario, lo que ha provocado que muchos de mis compañeros partidario que hoy son funcionarios, gracias al trabajo arduo que hemos venido realizando, hoy me hayan echado a un lado, tanto así que les hago ciertas llamadas tratando de dar respuestas a situaciones de compañeros del partido y ni contestan, hasta el punto de dejar en visto los mensajes que les envío.
El importante que se sepa, no he sido yo quien decidió no apoyar la plancha de mi partido, fueron mis compañeros los que me excluyeron, por entender que ya yo no soy importante por mi condición de salud, por mi forma transparente de actuar y algunas diferencias en el ámbito de ediles, hasta el punto de tildarme de que estoy loco, entre otras cosas más, que el algún momento tendré la oportunidad de expresarlas al Presidente, Luis Abinader.
Con esto no busco justificarme, pero sé que muchos se preguntarán ¿Qué pudo haber pasado para que William Ayala haya tomado esta decisión? Tengo muchas personas que respeto y merecen una explicación, pero debo aclarar: fueron mis compañeros de partido que al momento elegir su plancha no me convocaron a las reuniones que hicieran previamente, porque supuestamente yo no era importante y que buscarían el apoyo en otro concejal para ganar.
Concluyo este comunicado, diciendo:
“¡Soy y seré perremeísta hasta que me muera, nadie me puede sacar de la casa donde tanto esfuerzo hice al junto de valiosos compañeros y compañeras para su construcción!
