El día 3 de abril partió Vanessa Pérez Féliz para estar en el cielo al lado del señor.
El día 16 de abril se efectuó la Eucaristía del novenario de Vanessa en la Catedral Nuestra Señora del Rosario de Barahona, oficiada por el padre Ángel Cuevas.
Sus familiares y amigos llenaron la Catedral, como el día 3 habían llenado la funeraria El Ángel para luego darle cristiana sepultura
Vanessa fue una madre ejemplar que crió 3 hijos con mucho trabajo y honestidad.
Emprendió su trabajo haciendo bizcochos para mantener sus hijos y tuvo tanto éxito que su trabajo de repostería se prolongó por 45 años, hasta que se fue su último aliento.
Tuve el privilegio de ser su amigo fiel y abogado desde que su negocio fue embargado con la ejecución de una sentencia que desconocía, ya que había vendido un vehículo y no lo traspasó el comprador por lo que ella seguía registrada en la DGII como propietaria y por lo tanto como tercero civilmente responsable, a la que nunca le llegó la demanda, pero la embargaron. Ese caso lo resolvimos.
El caso y su manejo generó tanta confianza y amistad que ella se preocupaba por saber cuándo viajaba a la capital para mandarle a mis hijas pie de guayaba y de otras frutas, también cada año aportaba el hermoso y sabroso bizcocho para celebrar el aniversario del programa de radio y televisión Orientación Popular.
En los últimos meses de su existencia me visitaba para informarme todo lo de sus bienes y sucesores y tal modo que sus tres hijos recibieran sus bienes en partes iguales, como manda la ley, voluntad que pondrán en práctica sus hijos.
Debo resaltar que de Vanessa, una mujer cristiana, miembro de una distinguida familia, sólo se decían cosas buenas, al partir y congregarse sus familiares y amigos se escucharon los bellos recuerdos, todos positivos, sobre una mujer ejemplar.
No hay dudas de que los que le sobrevivimos la tendremos siempre presente y mantendremos vivo este gesto de solidaridad con ella, sus hijos y demás familiares.
Vanessa ¡Descansa en paz!