Ante todo el despliegue logístico, propagandístico y político que se hiciera para la inauguración de la primera etapa de la carretera Barahona-Enriquillo, con la presencia del presidente Luis Abinader y todos los medios nacionales presentes, la noticia y fotos de ese acto inaugural se hizo tendencia, provocando que personas de las distintas provincias del país y del exterior se apresten a venir a recorrer esa importante vía turística, y disfrutar de los balnearios de la denominada “Perla del Sur”.
Como “Cuatriboliao y minoso”, comunicador bloguero defensor del desarrollo turístico en nuestra región, publiqué y reenvié varias veces las notas e imágenes que circulaban en las redes sociales sobre el gran trabajo que el gobierno había hecho con la reconstrucción de la carretera Barahona-Enriquillo.
Ante tanta hermosura digital puesta a correr, el pasado domingo organicé un viaje con mi esposa hasta Enriquillo, quedando estupefacto ante lo que se había publicado y la realidad “vivida” al recorrer esa vía.
Observe que la reconstrucción se hizo sobre los tramos que estaban deteriorados. Lo que se había hecho del gobierno anterior, que se conserva en buen estado, se dejó igual.
Desde que pasas de La Ciénaga, hasta San Rafael, y más allá, es sencillamente intransitable y muy peligroso, pues el llamado “derrumbadero” de ese lugar provoca pánico al cruzarlo. El ‘polvazo’ ensucia los vehículos por abajo y por arriba por completo, y no vi obreros trabajando, con los equipos pesados estacionados sin operar.
El Mirador de San Rafael está terminado y quedó hermoso, pero el de Paraíso está en proceso de reconstrucción y le falta mucho.
El Mirador de Enriquillo está concluido y ha quedado muy lindo, muy buen atractivo en ese tramo carretero.
Desde Los Patos hasta Enriquillo se observa también lo mismo: tramos reconstruidos, y donde la carretera se ve bien, la dejaron igual, tal como la encontraron.
Una gran parte está señalizada, pero otros grandes tramos permanecen igual, a pesar de que se asfalto la parte que está deteriorada.
Ni modo; frustrado del viaje, retorne a Los Patos, disfruté del chapuzón, degusté un moro con pescados, tostones y ensalada verde.
Esa inauguración fue “un fraude”. La carretera Barahona-Enriquillo, su reconstrucción es doble: Abinader-Gonzalo, y deberían decirlo, pues se asfaltó los tramos deteriorados y se dejó igual lo que hizo el gobierno anterior.
La pura verdad!!!