SANTO DOMINGO: La explotación de tierras raras en la Sierra de Bahoruco ha generado gran preocupación entre ambientalistas debido a la falta de transparencia por parte del Estado en la gestión de este recurso estratégico.
Estos 17 elementos metálicos, esenciales para la fabricación de dispositivos electrónicos y tecnologías renovables, fueron extraídos en 2022 en un volumen de aproximadamente nueve mil toneladas. Sin embargo, los resultados de las prospecciones y análisis realizados aún no han sido divulgados.
Lo que agrava la situación es la proximidad de la Reserva Fiscal Minera de Ávila, donde se llevó a cabo la extracción, al Parque Nacional Sierra de Bahoruco, un área de alta biodiversidad y valor ecológico incalculable. La posibilidad de contaminación ambiental derivada de estas actividades mineras ha generado inquietud, especialmente porque las tierras raras suelen estar asociadas con procesos de extracción que pueden ser altamente contaminantes.
Además, la falta de información sobre las asesorías extranjeras involucradas en estos trabajos y la poca claridad sobre los planes futuros para la explotación de estos recursos han intensificado las críticas hacia las autoridades.
Ambientalistas y expertos llaman a un mayor escrutinio y transparencia en la gestión de estos recursos, subrayando la necesidad de proteger las áreas naturales y garantizar que cualquier actividad minera se realice de manera sostenible y responsable.