Aquino sostiene que la proximidad de las festividades y el cierre del año requieren de un ambiente de reflexión y optimismo.
Continuar con el proceso de reformas en este momento podría generar mayores tensiones y desconfianza entre la población, lo que no favorece un clima propicio para el diálogo y el consenso.
Es esencial que los ciudadanos sientan que sus preocupaciones son escuchadas y tomadas en cuenta, especialmente en un momento en que se espera reflexionar, celebrar y planificar el futuro.
Instamos a las autoridades a priorizar el consenso y la colaboración con los diferentes sectores de la sociedad, lo que permitirá alcanzar acuerdos más sólidos y beneficiosos para todos. Tomarse el tiempo necesario para discutir y analizar las reformas ayudará a construir un marco más estable y efectivo, garantizando que las medidas a implementar sean justas y equilibradas.
Al suspender el conocimiento de las Reformas para el próximo año, se enviaría un mensaje claro de que el bienestar de la población es una prioridad. Comencemos el nuevo año con un ambiente de optimismo y unidad, donde todos los sectores trabajen juntos por el desarrollo sostenible y el progreso de nuestro país.
